Pedro Sánchez aseguró que la reforma fiscal sería aplazada hasta que la economía lograra recuperar los niveles anteriores a la pandemia, pero eso no se traduce en que todas las subidas de impuestos para el próximo año queden aplazadas. Ayer la ministra Montero afirmó en una entrevista concedida a la agencia EFE que no renuncia a buscar la “progresividad” y que intentará construir un consenso en torno a los cambios fiscales en 2021. No obstante la portavoz si reconoció que las figuras deberán ir “acompasadas” con la realidad económica lo que podría retrasar las subidas.
En Hacienda se defiende que una reforma estructural no puede acometerse con la economía herida de gravedad por la pandemia, pero se mantiene en la idea de que la carta de presentación de cara a la negociación política será este acuerdo económico.
Montero dice que “hay que ser inteligentes y acompasar ese acuerdo programático al ritmo que marque la economía y por supuesto se tendrá que modular por esa situación económica para hacer las medidas en el momento más adecuado y serán de aquí al 2021 o serán más adelante”.
Este acuerdo se vió en los presupuestos que no llegaron a aprobarse y que afectaron al impuesto de sociedades donde se busca que las corporaciones no paguen menos del 15% y se elevará al 18%, también que las pymes que facturen menos de un millón de euros anuales se reduzca de 25% al 23%.
El acuerdo también recoge un alza del IRPF que subirá un 2% si se factura más de 130.000€ y si factura más de 300.000€, un 4%. También incluye reducción de IVA en veterinaria y productos de higiene femenina, en cuanto a la tasa Google y tasa Tobin ya están en proceso parlamentario.
Montero avanzó que se llevarán a cabo novedades a 2 velocidades a corto plazo, y a medio una profunda reforma fiscal, incluyendo “figuras tributarias nuevas” para la trasformación ecológica y nueva economía.
Aunque eso sí, la negociación se antoja compleja, Hacienda buscará el consenso político para llevar a cabo los primeros cambios tributarios y escuchará las propuestas de Ciudadanos. Los coqueteos con C’s ya han sido fuente de conflicto entre PSOE y Unidad Podemos, la ministra Irene Montero ha asegurado que “quién mira a la derecha no es el gobierno sino solo una parte de él” y distintas fuentes de Podemos creen que los acuerdos deben llevarse a cabo en base a los partidos que hicieron posible la coalición.
