Foto de: Metrópoli Abierta

Espectáculo de violencia en Cataluña en la tarde de ayer. La grotesca imagen ha sido protagonizada por un joven marroquí que, sorprendiendo a un agente de los Mossos de Esquadra en el exterior de un bar durante un descanso a las 8:30 de la tarde lo ha encañonado en la cara para posteriormente disparar.

La inmunidad cada vez mayor de estos grupos de jóvenes marroquíes en Cataluña al amparo de políticos y medios de comunicación encubriendo este tipo de actividades para no ser tildados de racistas es cada vez mayor, nunca apareciendo este tipo de noticias en los medios mas grandes y tradicionales. Ayer ha sido atacado un agente de las fuerzas del estado, pero días antes grupos de magrebíes Okupaban casas en la provincia de Tarragona ante la impasividad de los cargos públicos y periodistas, existiendo, cada vez más, ciudadanos de segunda y de primera.

Este tipo de situaciones deben ser atajadas inmediatamente, el crimen no puede ser protegido sea quien sea la persona que lo realice. Una sociedad que se presume justa juzga igual a todos sus ciudadanos, no protege algunos en nombre de un multiculturalismo que cada día parece debilitar la sociedad española. Y es que el doble rasero ya no se puede ocultar, nadie hablará del agente herido ¿Qué habría sucedido si la persona atacada fuese el magrebí? Buena pregunta.

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