La alcaldesa de Barcelona paga las obras para rehabilitar un edificio con okupas. El gasto ha llegado ha ser de 100.000 euros para realizar la rehabilitación de las obras de un edificio con okupas aprobando que estén sin ningún prejuicio. En España es un hecho que la okupación se está disparando desde 2016 en el que los casos se elevan un 50% especialmente en la Comunidad Catalana en la que se han producido 6.688 okupaciones en 2019, 5.000 de ellas en Barcelona.
Pero al parecer Ada Colau, alcaldesa de la ciudad, parece desinteresarse de este tipo de delitos. Fuentes de ABC afirman que la líder de Barcelona ha permitido que se legalice un local ocupado por antisistemas en el barrio de Barcelona llamado “Grácia”, uno de los más lujosos de la zona. Donde antes se encontraba un local ahora es una casa okupa, pendiente de un desalojo. Este lugar se encuentra en la calle Nil i Fabra nº17. En estos momentos es propiedad del Patronato Municipal de la Vivienda, aunque fue una comisaría de Policía Nacional en años anteriores.
En el 2015 el edificio fue okupado y, pese a esto, la alcaldesa no ha permitido el desalojo sino que se ha producido su reforma y se ha regularizado. Además de los hechos expuestos, el equipo del Gobierno ha hablado varias veces de los beneficios de su okupación. El punto mayor de la polémica se encuentra en la cifra de dinero que el ayuntamiento permitió gastar para costear las obras y servicios de reparaciones. A cambio de esta cesión y reforma, la asociación debería pagar una renta de tan solo 665,5 euros al año, siendo por un alquiler de tres plantas en una de las zonas más lujosas de la ciudad, una cantidad de 56 euros al mes, mucho menos que el precio natural de mercado.
